¿FE?

El viernes pasado la ciudad se volvió loca como todos los 28 de octubre debido a los festejos de San Judas Tadeo, que si bien hace muchos años visitar la iglesia de San Hipólito era considerado un acto de fe en los últimos años dejo de serlo para convertirse en una moda adoptada por los llamados regeeatoneros. ¿Por qué digo que es una moda y no un acto de fe? Pues por que este fragmento de la población que son en su mayoría jóvenes de entre 13 y 20 años han convertido a esta festividad eclesiástica en un mercado de delincuencia en el que abordan el metro con su santo en una mano y con una bolita de papel mojada en tiner en la otra mano, por que durante su camino van provocando e incitando a la violencia ya que van en grupos, esto les da valentía para golpear o robar a la gente entre todos, pero, ¿Por qué este santo se ha convertido en un símbolo de representación para estos jóvenes? Por que este santo es llamado el abogado de los casos desesperados y entonces estos jóvenes van a las iglesias y se “encomiendan” al santo para que salve sus almas, pero sin embargo no dejan de hacer las cosas por las que quieren el santo les redima.

El punto aquí es que yo no digo que todo el devoto de San Judas sea regeeatonero o que no tenga respeto por la gente que esta a su alrededor, lo que yo quiero exponer aquí es que entre los devotos de San Judas tenemos dos vertientes, por un lado las personas que creen y que dicen que este santo les ha concedido milagro y por el otro los jóvenes que se ven involucrados en un sentido de contradicción que por un lado intentan mostrar una conducta conservadora y religiosa y por otra no muestran ni un poquito de respeto por la gente. Así que en esta ocasión solo les puedo recomendar dos cosas, la primera que cada 28 de mes salgan con tiempo de sus casas y que cuiden sus bolsas y todas sus cosas de valor por que quien sabe de donde salen tantos “fieles” de este santo.